viniste en la oscuridad
caminabas lento
eras ámbar viejo y oscuro
te atrapé bajo la almohada
quería retenerte
mas
apareciste frente a mi
eras niño mago
de tus manecitas nacían vívidos
como insectos inquietos y relucientes
bajo tu serena contemplación
innumerables ámbares
eras corpúsculos con ellos
eras un ejército de luces ámbares
mientras mis manos estrujaban
en vano
aquel intento de secuestro
mientras mi aliento suspendido
no probaba respiro
te volviste aurora
y
me revelaste desde el horizonte
la Gloria de Dios
____María Quaglia____